El Abecedario de la Felicidad – V de Vaciar

“No compres nunca lo que te sea inútil bajo el pretexto de que es barato”

Thomas Jefferson

“Oír o leer sin reflexionar es una ocupación inútil”
Confucio

Vivimos en una sociedad bien repleta de consumo, publicidad, marketing, información, ofertas y estímulos de todo tipo. Esto es algo que nadie puede negar. ¡Qué fácil es llenar nuestra vida de objetos que raramente utilizamos, de servicios que pronto abandonamos, de cantidad de información que se agolpa en nuestra mente! Lo último es algo así cómo vivir en un lugar donde no caben ideas nuevas, donde actuamos de una determinada manera y que habitualmente no es la más adecuado y ventajoso para nosotros.

Es muy importante vaciar nuestra vida, tanto a nivel físico como mental, para poder movernos y dar cabida a algo nuevo y mejor.

Vaciar la casa

Disponer de un trastero es un espacio extra de espacio que puede ir muy bien siempre y cuando lo mantengamos a raya. En mi vida he realizado dos mudanzas y en los dos pisos tenía un pequeño trastero. Los días previos al traslado se convirtieron en un trasiego de viajes al contenedor de basura. Aunque algunos objetos los llevé a la nueva casa, aunque otras cosas las regalé… la mayoría eran objetos inservibles que había acumulado por si en alguna ocasión los utilizaba. Algo que nunca ocurrió. En general tenemos una propensión a acumular objetos, nos parece mala idea deprendernos de ellos. A lo mejor es que esto nos crea sensación de seguridad.

Otro tanto podemos decir de la cantidad de servicios a los que nos apuntamos y que nos resistimos a abandonar aunque ya no los usemos: gimnasio, suscripción a revistas, seguros no ajustados a nuestras necesidades, socio de club de futbol, móviles con tarifas no adecuadas a nuestro consumo y un largo etcétera.

Unos hábitos de consumo más racionales son más ecológicos y más económicos. Cuidaremos más el medio ambiente, nuestra economía estará más saneada y por lo tanto la felicidad será algo más sencillo de alcanzar. Antes de comprar algo o contartar un servicio piensa si es realmente necesario para ti. Y en caso afirmativo averigua si puedes disfrutar de ello sin necesidad de adquirirlo, practicando el consumo colaborativo.

Vaciar el trabajo
En el trabajo podemos aplicar lo mismo que en casa y también algunas cosas más.

Es muy fácil, y habitual, estar en el trabajo atrapado en un círculo en el que realizamos las tareas de una determinada forma sin darnos cuenta que continuamente las circunstancias cambian, y que seguramente ya no somos ni eficaces ni eficientes. El trabajo puede resulta un lugar de sufrimiento, donde se corre y se corre para no llegar a ningún lugar. Deberíamos reservar tiempos para parar y revisar. Se trata de trabajar obteniendo resultados y no solo de trabajar “a secas”. Estos son algunos asuntos sobre los que reflexionar:

¿Todas las tareas reportan algún tipo de beneficio a corto, medio o largo plazo? Combinarlas, no sería apropiado que todo lo que hagamos esté enfocado, por ejemplo, solo cómo una inversión a largo plazo. Y por supuesto eliminar aquello que ya no suponga resultados.
Analizar la relación con clientes y proveedores. Un cliente demasiado exigente con los precios, que demande una calidad que no le podemos proporcionar o que no cumpla con los pagos resulta ser un cliente problemático. En muchas ocasiones será mejor dejar de trabajar con él y concentrarse en otro tipo de clientela. Lo mismo puede aplicarse con un proveedor que no cumpla con los plazos establecidos o que nos proporcione productos de mediocre calidad.
¿Se pueden optimizar los procesos tanto de producción cómo administrativos o comerciales?
¿Suponen el local o las oficinas un gasto (de compra o alquiler) asumible y adecuado? ¿Quizás podemos realizar nuestra labor en un local más económico?
Vaciar la mente
Vivimos en la era de la información y en la época de la crisis. Total, que sin darnos cuenta estamos llenando nuestras mentes de pensamientos, y generalmente negativos. Vacía tu mente, prohíbe el paso a lo negativo y que entre lo positivo:

No estés “enganchado” al telediario porque puedes llegar a la conclusión errónea de que el mundo se acaba pasado mañana. Utiliza otros medios de información más positivos y constructivos cómo Noticias Positivas oEl Blog Alternativo.
Desconecta de vez en cuando para tenerlo todo más claro. Busca tu técnica: meditar, pasear tranquilamente en soledad, hacer deporte,…
Lee libros y revistas motivadores, asiste a cursos y a conferencias, fíjate en las personas felices.
Más V
Valentía: la satisfacción de haberlo intentado.
Valorar lo que hacen los demás y también lo que haces tú mismo.
Ver y observar la manera de actuar de las personas felices.
Estas son las letras del Abecedario de la Felicidad